En una entrevista desgarradora con la presentadora de televisión australiana Ally Langdon, Andrea y Paul Haynes revelaron el inimaginable dolor que sintieron al contar la terrible experiencia de tener que tomar la devastadora decisión de dejar ir a su amada hija de 13 años, Esra Haynes. Su historia es una de profundo dolor, mientras lidiaban con las consecuencias de una fatídica fiesta de pijamas que terminó en tragedia.
Esra, una joven atleta llena de energía conocida por su determinación y talento, tenía un futuro prometedor por delante. Su pasión por las carreras de BMX y su papel como cocapitana del Montrose Football Netball Club subrayaban su entusiasmo por la vida. Sin embargo, en esa noche fatal del 31 de marzo, la vida de Esra dio un giro trágico cuando fue víctima del insidioso atractivo de una peligrosa tendencia que arrasaba en las redes sociales: el chroming.
La fiesta de pijamas, una reunión rutinaria con amigos, tomó un giro siniestro cuando Esra, en busca de un subidón letal, inhaló desodorante en aerosol. Lo que comenzó como un acto aparentemente inocuo se convirtió rápidamente en una pesadilla cuando Esra sufrió un paro cardíaco y daño cerebral irreversible.
Para Andrea y Paul, la angustia de recibir la llamada que todo padre teme se vio agravada por la conmoción de descubrir que su hija estaba involucrada en el cromado, una práctica peligrosa que antes desconocían. Corrieron al lado de Esra y se aferraron a la esperanza mientras ella luchaba por su vida en el hospital, rezando por un milagro que nunca llegó.